Translate

martes, 8 de enero de 2013

UNA HABITACIÓN PROPIA




Muchas mujeres y algunos hombres, nos hemos sentido desde hace unos años en la obligación de iluminar, de rescatar del olvido y de la indiferencia, la obra de las mujeres que han sido responsables directas de la evolución positiva de la sociedad. Mujeres que han cultivado las artes plásticas, que han compuesto partituras, que han contribuido a la evolución del pensamiento, que han luchado en las barricadas en defensa de las libertades; que han escrito novelas, poemas, ensayos ; que han pintado cuadros, dibujado, grabado y esculpido. Mujeres que han enseñado y pronunciado discursos. Que han creado.

Muchas de estas mujeres sin embargo son olvidadas en los libros de historia y en los manuales de arte. La emancipación de la mujer, hecho clave el siglo XX, a penas se nombra en los libros de texto del alumnado de secundaria. A veces su innegable protagonismo en la creación de un hecho artístico es considerado irrelevante y secundario. Su género las convierte inmediatamente en menospreciados  apéndices…

Es por ello que ésta segunda época de Visible /Invisible - y todas las que quieran venir- estarán dedicadas a hablar de estas mujeres y ha contribuir a restaurar el equilibrio entre lo masculino y lo femenino.

Resulta contradictorio querer iniciar esta nueva época con la figura de una escritora mundialmente aclamada y reconocida. Me refiero a Virginia Woolf. A pesar de su gran notoriedad en vida también sufrió la discriminación de su sexo, no pudo acceder a la universidad y se le estaba vetado el acceso a determinadas bibliotecas. Autodidacta, brillante, cultivada y pionera del feminismo fue una de las primeras en preguntarse porque era tan difícil para muchas mujeres la creación literaria. Woolf da sus claves en su imprescindible ensayo Una habitación propia.  Woolf repasa la vida de las mujeres de épocas anteriores. Las descubre destinadas desde niñas a la vida matrimonial, alejadas a la fuerza de la formación académica, recluidas en los hogares familiares primero de sus padres y luego de sus maridos. Las adivina compartiendo ruidosas estancias y siendo molestadas con innumerables interrupciones. La observa dependiendo de la economía de otros y castigadas por su osadía si dan rienda suelta a su necesidad de escribir. Concluye Woolf que todo lo que necesita una mujer para dedicarse a la literatura y por extensión a cualquiera de las artes, es una habitación propia e independencia económica.

Sin embargo casi un siglo después, hemos podido comprobar, que estos dos importantes factores no son suficientes. Los siglos de esclavitud y discriminación han dejado marcada con hierro candente su impronta. La mujeres en occidente - no digamos en otras latitudes - seguimos teniendo mucha más dificultad que los hombres a la hora de escribir, pintar, esculpir, filmar, dedicarnos a la política o dirigir colectivos. Más allá de la censura más o menos velada de la propia familia, los propios  compañeros u otras mujeres,  las mujeres intelectualmente activas somos frenadas por la culpabilidad y el autosabotaje inducidos por modelos mentales de los que todavía nos cuesta librarnos.
Por ello, cuando una mujer ha conseguido vencer todas las dificultades consiguiendo expresar y regalar a la humanidad sus talentos se merece el homenaje del reconocimiento y la lucha para que su contribución no sea ignorada. VISIBLE/INVISIBLE quiere hacerle ese homenaje.  


 


2 comentarios:

  1. "Una habitación propia", lo tengo de libro de cabecera, me acompaña para seguir adelante.
    Un placer leerte.

    ResponderEliminar